viernes, marzo 16, 2007

Cuidado con el radar.


No se trata de perder los puntos del carnet de la manera más tonta. Hay, hoy en día, medios técnicos que te ponen sobreaviso para que vayas con un cuidado especial en no pasarte de los límites de velocidad que marcan las señales en esos puntos más espiados por los radares delatores.


Pero nosotros somos quien somos y donde no llegamos con el microchip, el tom-tom y la antena lo suplimos con nuestro irrepetible ingenio iberico.


Vale más una imagen que mil palabras, para estos casos.






Más lejos...



Cuando te planteas una travesía larga te sueles armar de paciencia. El viaje es lo importante, no el destino, como decía el poeta griego. -"Que llegues bien cargado de sabiduría y enseñanzas..."; "El destino no es lo más importante...". Y todas esas otras sentencias tan ciertas que siempre giran y giran en una mente inquieta como la mía.

Pero cuando ya estás atisbando las costas de la Isla a la que anhelas llegar, te invade el desasosiego y el temor de que ningún accidente de última hora pueda echar por la borda tu paciencia de muchos meses, tus silencios, el haber evitado caer en las simas tentadoras del egoismo o la autocompasión que te pudo haber gratificado, de forma efímera, momentos de desazón.

Itaca está en el horizonte y pido, o mejor dicho, me reclamo últimos alientos para poder cumplir esa parte de la travesía, la que ahora veo más difícil por más anhelada y con una posibilidad de desembarco otrora casi utópica. La utopía...la única verdad, como siempre y como nunca.

Pero
"iremos más lejos, siempre más lejos, más lejos del "hoy" que aún nos tiene prisioneros".

Gracias a todos

MONOTEMA




Hace unos días escribía yo en un foro:

"¿Y la sanidad pública que no puede absorver la inmigración?

¿Y el día si y el día también que descubren a nuevos dirigentes municipales, y casi siempre del mismo partido, implicados en fraudes y corrupciones urbanísticas?
¿Y que ya no queden sin urbanizar ni los terrenos rocosos?
¿Y las empresas extranjeras que después de haber recibido todas las subvecciones públicas habidas y por inventar se deslocalizan a Malasia?
¿Y las vergüenzas de la RENFE?
¿Y el cambio climático?
¿Y la renovación del Concordato?
¿Y los salarios basura?
¿Y la subvención de la miseria en lugar de la de la creación de empleo?
¿Y que mucha gente humilde vuelva a vivir realquilada?
¿Y las pensiones mínimas de jubilación que condenan a la pobreza a un 20 % de nuestros mayores?
Pues no, de todo eso nada de nada, yo vivo en el país en que la oposición tiene como único discurso el derrocar a un gobierno por haber cambiado de sitio a un preso y a un gobierno que como única ocupación posible el tratar de salvar el cuello. Todo lo de antes no interesa a nadie por lo visto...
¡País!"

Tuve las dos réplicas que siguen de los amigos Alas Rotas y Viccil:

"Ya sabes, es la estrategia electoral ( vale todo al parecer ) mentiras, engaños, artimañas.... tienes suerte de estar sólo un poco harto, yo estoy mucho más que harta, pero sobre todo tengo miedo, te juro que me causan pánico, en todo esta legislatura no han hecho oposición, repiten hasta la saciedad un único acto: acoso y derribo al gobierno... son peligrosos, muy peligrosos."

"¿Y te sorprende?
Hay una encuesta radiofónica llamada “el pulsómetro”, que desde hace bastante tiempo sitúa las tres principales preocupaciones de los españoles en el terrorismo, el paro y la inmigración. El orden puede variar, pero siempre son esas.
No tengo ni idea de cuales son las preguntas, que eso también podría ser motivo de análisis, “¿qué prefiere: qué gane el PP o qué pierda el PSOE?”, pero sirve para dar una idea de por donde van nuestros temores.
Mueren más personas al año en accidentes de circulación que en toda la historia de atentados terroristas, pero tenemos la impresión de que los accidentes de tráfico es algo que les ocurre a los demás por torpes o por ir muy deprisa o por mala suerte, . . . , es decir, que depende de nosotros mismos, mientras que los atentados son algo mucho más imprevisto e injusto y no importa que la posibilidad de sufrir un atentado sea francamente remota (salvo que vivas en Irak).
Con el paro ocurre algo parecido. El desempleo ha disminuido mucho en la última década, pero la posibilidad de perder nuestro empleo sigue siendo una perspectiva que horroriza por lo que supone de incertidumbre en nuestras condiciones de vida y alteración de la rutina diaria; seguramente debería figurar como inquietud la precariedad laboral y los bajos salarios, pero aunque ese pueda ser el caso en el que uno se encuentre . . .” . . . que me dejen como estoy”.
¿y la inmigración? No se cuanta gente habrá perdido su puesto de trabajo por causa de un inmigrante (aunque conozco algún caso de mujeres que han perdido a su marido), o cuantos actos delictivos les son atribuibles, pero considerando que ya son oficialmente más de tres millones los que conviven entre nosotros, me da la impresión de que es un porcentaje ínfimo. En este caso, creo, predomina el miedo al cambio que se adivina al compartir nuestro modelo social con otras culturas y formas de vida, el temor a sentirnos desplazados y no sabernos adaptar, y la repercusión mediática que tiene cualquier suceso con protagonistas foráneos no contribuye a mejorarlo.
Nuestras preocupaciones siempre son mayores cuanto más desconocidas e imprevisibles. Siempre nos daría más miedo un bonachón “marciano” verde que un perro enrabietado, y los políticos lo saben y lo usan desde siempre, y en todas partes, ya sea para distraer la atención o para justificarse. Deberíamos estar más apegados a la realidad y los problemas cotidianos, pero salvo que suframos una mutación genética no lo veo muy probable.
Algunas cuestiones que planteas como la sanidad o las pensiones, si son motivo de inquietud pero no llegan al nivel de preocupación porque, mejor o peor, es algo que se considera seguro y garantizado. El tiempo dirá.
En cuanto a la Renfe, bueno, están invirtiendo tanto en el AVE que otros servicios se les resienten. Pero al final iremos todos en AVE: “. . . avé si hoy funciona . . . avé si hay suerte . . . avé, avé . . .”
En cuanto a la vivienda . . ., si, eso ya ha entrado en las estadísticas de nuestras preocupaciones, pero dado la cantidad de intereses cruzados y la falta de ideas políticas dudo que vayamos a ver cualquier iniciativa al respecto por ahora."


Ahí quedan original y copias...

Mujer trabajadora. El monumento



Días de descanso (forzado) sin poder "trabajar" para el blog....Me disculpo con mis fieles lectores (al menos a dos alcanzará la cifra para poder usar el plural).


Me envian uno de esos correos reenviados, y esta vez se trata de un monumento a la mujer trabajadora y está -la obra en cuestión- expuesta en la calle de una capital de un país magrebí.

Me limito a compartirla como curiosidad antropológica. ¡Ejem....!