martes, diciembre 05, 2006

Racismo del "doméstico, cotidiano y consentido"


La Posada Ducal





Esta noticia nos da un testimonio claro como en España no se puede insultar, por su condición de extranjero, a un magrebí, a un chino o a un senegalés bajo pena de ser considerado un racista y un desgraciado carcamal susceptible de ser duramente castigado por la ley.

Pero si eres catalán, según dónde y cómo, hay "barra libre" con uno.
Que asquito.¡¡¡


Fuente:
http://www.el3devuit.com/ 2.12.2006 :

Estaba en la provincia de Burgos, de vacaciones, con su mujer y su hija de dos años, sentado en una mesa del la Posada Ducal..Recomendaba a su mujer comerse el primer plato porque les habían avisado que el segundo tardaría en llegar. Son vecinos de Sant Pere Molanta, catalanoparlantes y, naturalmente, la lengua que estaba utilizando entre ellos era el catalán. Pero al camarero que los atendía no le debería parecer tan normal porque les recriminó el uso del catalán y les exigió que, aunque fuera entre ellos, utilizaran el español. Joan Raventos lo encontró insólito, incomprensible.. El mismo se dedica a la restauración y nunca se le habría ocurrido hacer una cosa así, exigirles a unos clientes que hablaran una lengua u otra “Quien paga manda” o “los clientes siempre tienen en la razón”, son dichos populares en Catallunya.
Pero Joan Raventos, lo que decidió, sin perder las formas, aún después de tal desagradable sorpresa en el trato, decirle al camarero, de nombre Oscar, que a quien se estaba dirigiendo en catalán era a su mujer y no a él. La respuesta del camarero de la Posa Ducal fue: “tengo la escopeta a punto para el primero que lo intente”. Joan, poco después le insistió en la extravagancia que representaba exigir a los clientes que hablaran entre ellos en castellano, teniendo en cuenta que, posiblemente, unos clientes ingleses o suecos no habría tenido este problema. El tal Oscar, entonces, aseguró que en su establecimiento “los ingleses hablan entre ellos en castellano”.

La Posada Ducal es un establecimiento en la localidad de Peñaranda de Duero, en plena Ribera de Duero, una bellísima región a la que se había desplazado, de vacaciones, Joan Raventos a primeros de Setiembre. El restaurante es conocido en la zona y se dirigieron a él por la expresa recomendación de un bodeguero al que habían ido a visitar ”Queríamos comer bien y por eso fuimos” de esa forma se presentaron en la Plaza Mayor de ese pueblo, donde está el restaurante que también ofrece alojamiento, con la posibilidad de hacer la reserva por teléfono, o bien a través de la página web
www.laposadaducal.com. No volveran, no solamente por el trato recibido “después de decirme aquellos de la escopeta nos levantamos de la mesa y nos fuimos” sino porque se encontraron que su reclamación había sido archivada i que los responsables de la Posada Ducal ni tal solo intentan disimular su animadversión hacia “las nuevas generaciones de catalanes", así, tal como suena, sin matices ni preambulos. Con esas mismas palabras se hicieron notar en la respuesta a la reclamación interpuesta por Joan Raventós en la Junta de Castilla y León que, por descontado, consideró el episodio poco más que una anécdota y que no tenía “la suficiente relevancia como par considerarlo una infracción adminsitrativa sancionable” .

Desde el restaurante La Posada Ducal, no niegan hechos: “El hecho de (según el señor Joan Raventos) obligarles a utilizar el español en mi presencia fue debido a que lo poquito que quiero entender el catalán cuando se dirigió a su esposa no lo puedo asegurar pero me pareció que utilizó unas palabras despectivas hacia mi persona algo así como: “Estos españoles...” “ según consta textualmente en la resolucón del archivo de actuaciones previas, sinó que se permitió ir aún más lejos, frente al beneplácito de la Junta de Castilla y León, porque, a continuación enseñan sus cartas y muestran sin tapujos la xenofobia que profesan hacia los catalanes. La Posada Ducal, no tuvo reparos en decir, como despedida y para justificarse de forma plena
“con esta carta o alegaciones que les escribo si quiero mostrar mi gran preocupación por el gran cambio que se ha producido en las nuevas generaciones de clientes catalanes, las cuáles quedan totalmente definidas en la persona del señor Juan Raventós que a diferencia de generaciones más adultas deja mucho que desear en cuánto a maneras, educación y respeto".

La despedida y la salida del restaurantes tampoco resultaron muy amables, por la interposición de la reclamación y la amenaza latente de la escopeta, pero al menos Raventos oyó una voz de la mesa de al lado que le decía que lo mejor que podía hacer era marcharse, despues de asegurarle que “En Castilla no somos así”, “Así lo espero” asegura.

5 comentarios:

zorgin dijo...

estos gallegos..., que los parió!
;)

Francesc dijo...

Una de las cosas que me fastidian en estos casos (me han ocurrido algunos parecidos) es que te oigan hablar en una lengua que no entienden y dan por supuesto que lo haces para que no te entiendan o para hablar mal de ellos.

"No señor, yo hablo en mi lengua, no lo hago por usted...faltaría más que para que usted me entienda, cuando no hablo con usted, tenga que hablar la suya "

¡ Mucho acomplejado es lo que hay !

(En todas partes. De eso no se salva ningún territorio poblado por humanos)

Francesc dijo...

Una de las cosas que me fastidian en estos casos (me han ocurrido algunos parecidos) es que te oigan hablar en una lengua que no entienden y dan por supuesto que lo haces para que no te entiendan o para hablar mal de ellos.

"No señor, yo hablo en mi lengua, no lo hago por usted...faltaría más que para que usted me entienda, cuando no hablo con usted, tenga que hablar la suya "

¡ Mucho acomplejado es lo que hay !

(En todas partes. De eso no se salva ningún territorio poblado por humanos)

Francesc dijo...

¡ Hala ¡ Dos veces.

No hay dos sin tres....

zorgin dijo...

Ud lo ha puesto dos veces para esconder algún metamensaje..., es Ud muy astuto, porque lo ha hecho de manera tal, que puede decir cosas malas de los que opinamos...
y sin que nos demos cuenta!